sábado, 2 de diciembre de 2006

Buenas tardes, ¿puedo ayudarle en algo?

Sonrisa perfecta. Pose perfecta. Actitud perfecta. Acercarse perfectamente al cliente. Decirle, perfectamente: "Buenas tardes, ¿puedo ayudarle en algo?". Esperar, perfectamente, a que el cliente responda con un "Sí, mira, estoy buscando esto y lo otro" o con un más lógico "No, sólo estoy mirando, gracias" (este último comentario puede ir seguido de una más que probable sonrisa falsa para que veas que estás tocando los huevos). Si la respuesta es la primera, pasas perfectamente a intentar parecer todo un experto en moda, cuando lo único que sabes es tu talla (y porque te la ha repetido tu madre un millón de veces). Si eso no cuela, le explicas al cliente que es tu primer día y que andas un poco despistadillo. Eso siempre ayuda, y si el cliente es simpático hasta se ríe. Si la respuesta es la segunda, respondes con un perfecto "No hay problema" y te marchas. Todo esto durante 6 horas. Empiezas con una sonrisa perfecta, una pose perfecta y una actitud perfecta para terminar con una sonrisa de cabrón, una pose de hijodeputa cansado y una actitud no demasiado amable.

Resumen: un primer día perfectamente perfecto.

2 comentarios:

Ferran Pérez dijo...

Sort tens de recordar la teva talla de roba, jo acabo provant-me totes les que s'aproximen al meu volum corporal (ratio 40-44) normalment sense éxit.

Ánimo currante!

aizun dijo...

quejica, 6 horas no son nada ...